Más de 50 migrantes, principalmente guatemaltecos, murieron ayer en un accidente luego de que un conductor manejó a exceso de velocidad el tráiler en el que viajaban hacinados y perdió el control al salir de una curva en la carretera Chiapa de Corzo-Tuxtla Gutiérrez.
Algunos de los centroamericanos murieron sofocados mientras se intentaba rescatarlos de entre los restos de la caja; al cierre de la edición el gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, informó que sumaban 54 muertos y 105 heridos (83 hombres y 22 mujeres), tres de gravedad.
La Fiscalía General de la República (FGR) anunció que atraerá la investigación del accidente. “Por ser un lamentable caso de migrantes acaecido en una vía de comunicación federal, la fiscalía especializada en materia de derechos humanos actuará junto con la fiscalía especializada de control regional, así como con todo el personal técnico y de apoyo que sea necesario, para llevar a cabo las diligencias correspondientes”.
El Ministerio Público de la Federación aseveró que mantiene coordinación permanente con las autoridades de Chiapas y con la Guardia Nacional, “en un equipo integral de trabajo, que ya se encuentra en funciones”.
El tráiler Kenworth, con placas 444-DW-4, volcó alrededor de las 15:30 horas y justo después de pasar un retén. Primero se impactó en un muro de contención y enseguida con un puente peatonal. La caja se desprendió, giró sobre la carretera y decenas de migrantes salieron disparados.
Los cuerpos quedaron esparcidos en distintos puntos del asfalto. Según la fiscalía estatal, algunos murieron sofocados y otros aplastados por la caja del tráiler.
Sin dar más detalles, la Dirección General de Protección Civil aseveró que en el accidente ocurrido a la altura del puente Belisario Domínguez y Ribera Cauharé estuvo involucrado otro camión. Según uno de los pobladores que apoyó en un primer momento para sacar a los heridos, el chofer de la unidad ya no estaba cuando se acercaron. Otros testigos apuntaron que huyó por el río que corre a un lado de la vía.
