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Exigen árbitros y dirigentes deportivos seguridad en partidos 

El representantes de las Ligas General Manuel Cabrera Carrasquedo. Gerardo Meléndez Matías, expresó su repudio a las agresiones contra los árbitros.
Foto(s): Cortesía
Lorena Jiménez Salomón

En las canchas de futbol siete del complejo deportivo El Barrio Oaxaca se registró el pasado jueves una agresión a un árbitro, por lo que diferentes colegios de árbitros y dirigentes deportivos levantaron la voz para exigir un alto a los ataques físicos y verbales.


Y es que el pasado 22 de abril, durante el encuentro entre Calabacitas Tiernas y Realcoholicos, el jugador Spencer Martínez, en una actitud de frustración porque su equipo perdía por goleada de 6-12, se fue a golpes y patadas en contra del árbitro Pablo Juárez.


Futbolistas de su mismo equipo y del conjunto rival trataron de calmarlo, al igual que el administrador de las canchas del Barrio Oaxaca, Eduardo Guevara, pero el jugador no supo controlarse.


Derivado de ese hecho, las Ligas de Futbol Soccer y Futbol Fiete General Manuel Cabrera Carrasquedo, repudian las agresiones a los árbitros y jugadores, por lo que conjuntamente con las ligas particulares de futbol rápido se unen para ponerle un alto a ese tipo de personas.


“Es lamentable que esto suceda en un juego”, señaló el responsable de estas ligas, Gerardo Meléndez Matías.


Agregó que el deporte debe coadyuvar para el bienestar de quienes lo practican. y no es posible que personas que no saben controlar su carácter, lesionen o insulten a quienes cumplen con su trabajo de sancionar un juego.


Por su parte, el coordinador de esas ligas, Fernando Cruz Pérez, sentenció que quien golpeó y lesionó a un árbitro en la Liga El Barrio Oaxaca, “no es posible que en lugar de divertirse y hacer ejercicio, buscan desquitar sus traumas”.


Adelantó que se platica con otras ligas de futbol soccer, futbol siete, futbol rápido y baby fut General Manuel Cabrera Carrasquedo, El Barrio, Mundo 7, Cancha del 10, Los Conos de 5 Señores, y San Juanito para vetar a jugadores que agredan a los árbitros, espectadores, directivos y a jugadores de otros equipos.