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Día de la Libertad de Expresión

Día de la Libertad de Expresión
Foto(s): Cortesía
Lorena Jiménez Salomón

Cronista: Antonio Ávila Galán

Siendo presidente de la república Miguel Alemán Valdés, el 7 de junio de 1951 se inicia a celebrar el Día de la Libertad de Expresión, fue instaurada por los editores de los periódicos más importantes de esa fecha. Esta conmemoración, según se afirma, es para destacar: “la trascendencia para la democracia mexicana de una prensa libre e independiente”. 

Es a los diferentes medios informativos, la ocasión de celebrar el día de la libertad de expresión, la prensa libre, la prensa que habla y lo dice todo. Es el día siete de junio el de merecer el mensaje para honrar al hombre hacedor de palabras y componenda en las frases dignas del día para las primeras noticias. El periodista que hace uso del derecho de poder decir las cosas y las publica en algún medio impreso; es un hombre en busca del lenguaje, en pos de pescar la palabra cotidiana para rememorar los hechos que suceden en su entorno. 

Día de la libertad de expresión, libertad de palabra, y la palabra es magia, llena de plasticidad que envuelve al cielo en un mundo lleno de imágenes. El símbolo de llevar la ofrenda floral ante el monumento del ilustre mexicano, oaxaqueño de nacimiento, don Benito Juárez es porque representa la imagen desde hace más de un siglo de la perseverancia, la lucidez y la libertad de expresión entre el derecho de los pueblos a hacerlo. El periodismo en México, nace y renace cada día del mañana,  nace y renace en el hoy para fincar en palabras el acontecer cotidiano. México ha sido patria de grandes hombres que han ilustrado el periodismo, a lo largo y ancho del país esos hombres han asumido su gran responsabilidad y reto ante tal aseveración, crear en la noticia escrita o hablada, la filosofía de la democracia, pelear por la justicia ante la trinchera semejada que nos da una página en blanco. El periodista los ha habido y los hay, que pelean por grandes ideales soñados; han luchado por escribir la verdad ante la sociedad que cada día ha ido perdiendo sus valores morales. El periodista hombre de Dios como cualquier otro, no es cualquier otro, es otro en él mismo, que se entrelaza entre las palabras cotidianas o la nota que trasciende a lo usual, o inusual.

Se celebra a lo largo y ancho del país, el día de la libertad de expresión, día del periodista, ese ser que a veces va, a veces viene, como vaivén detrás de la palabra en el propio vaivén de los hechos. Ese ser tan cotidiano como la palabra hablada, que al escribirla se tiñe de colores por la vivacidad de quien escribe. Los periodistas del mundo que nos han acontecido en el tiempo y en la forma, se merecen un aplauso por ser ellos hacedores de la palabra en la buena noticia o en la desmemoria de la noticia cotidiana. Son ellos el canto imaginario de la vida, ante la palabra escrita o hablada que regalan al pueblo, regalan a la vida. El periodista hombre de Dios, también pasa por la vida y deja huella escrita, deja su voluntad en la palabra escrita, deja su voluntad de servir en la expresión cotidiana del momento.

Los que escribimos en algún medio, o los que expresamos la inquietud de la nota cotidiana en algún noticiero radiofónico, debemos ser acordes a nuestra realidad propia, de querer ser motivos ante la sociedad de marcar las injusticias muchas veces cometidas por las autoridades: no es pecado hacerlo, mayor pecado es quedarse callado, porque en esta forma el periodista se vuelve cómplice de tal acoso del látigo que trae consigo la injusticia. Desde luego que debemos vivir un nuevo tipo de periodismo en la región de Tuxtepec y en el país entero, y este día que se marca la ocasión para celebrar el día de la libre expresión, -libre en expresión-, se debe hacer valer esta con más justicia, con menos implementación de chantajes, para no motivar al mal manejo dentro de sus actividades a los funcionarios