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95 Aniversario: Tuxtepec de Villa a Ciudad

a Villa de Tuxtepec en 1928, año en que eleva su categoría a ciudad.
Foto(s): Cortesía
Antonio Ávila Galán

I

LEALTAD Y ARMONIA

Un aniversario más de la batalla de Puebla. Hecho histórico que engrandece al mexicano por su valor en la defensa. 

La historia cuenta: “El 5 de mayo de 1862 los cañones resonaron y los rifles dispararon y más de mil soldados franceses cayeron ante esa enramada de balas”.

Fecha simbólica sin duda, de la defensa del mexicano hacia su tierra, país y pueblo.

El 5 de mayo, para Tuxtepec es importante, porque es cuando pasa a ser de villa a ciudad.

No hay mayor grandeza de un pueblo que la virtud amorosa de sus hijos. Las obras que dejan para bien de su comunidad, siempre hablarán al corazón de las futuras generaciones. Cantarán al espíritu de sus descendientes: no hay más grandeza que vivir el pasado con regocijo y revivirlo en el margen de nuestras almas, como río que fluye y nos baña, lleno de lealtad y armonía.

Tuxtepec fue siempre reconocida como Villa: primero Villa de Medellín, después Villa de San Juan Bautista Tuxtepec.

Tochtli, además forma las voces de la llama transparente del ocaso, la historia de un pueblo que se convierte en ciudad golpeada, arrastrada por la voluntad inconsciente de los hijos de Tochtli. El conejo forma un caracol de eco de cientos de años, cuando de la esperanza; hoy se graba tu nombre, a la hora de repartir las cenizas de tus hijos esparcidos en el lenguaje del recuerdo. Yo soy la pieza escultural del oro verde, floreciendo a lo largo de tus caminos. Soy lo femenino, el Tochtli que coquetea con las mariposas de la tierra de todos. Nadie es tarde para lanzar el primer grito que cruza la razón de la conciencia y el milagro. Siniestra esta tierra milenaria, adornada con flores de cempasúchil, con la belleza sobresaliente de veredas chinantecas y mazatecas, cuyo huipil hace del crepúsculo azul, la diadema incrustada de todo sueño de Tochtli; a la hora de proferir los milagros de la lengua refiriendo la palabra amor, que dejaron nuestros antepasados: nuestros abuelos; “Baúl de sabiduría que poco o rara vez abrimos”.

II

95 AÑOS: TUXTEPEC DE VILLA A CIUDAD

LA ESMERALDA DEL PAPALOAPAN 

Se elevó de Villa a Ciudad el 28 de abril de 1928, pero se hizo oficial el 5 de mayo de ese mismo año, en el periodo de la autoridad del pueblo de ese entonces, cuando el señor Carlos Cruz Montiel, que en sus dos años de mandato 1927-1928, tramitó ante el poder legislativo del Estado de Oaxaca; que Tuxtepec recibiera el título de Ciudad. Es por eso que, en hechos históricos como estos, los pueblos se llenan de festejos, de regocijo, de buenas enmiendas, de identidades y convivencias; es decir, se enriquece el alma de un pueblo y ese hecho jamás se olvida o se guarda simplemente en el baúl de los recuerdos.

Hoy 5 de mayo del 2023, las autoridades del Ayuntamiento constitucional de San Juan Bautista Tuxtepec, Oaxaca; tanto la presidencia municipal a cargo del Lic. Irineo Molina Espinoza, así por el interés de la regidora de Educación, Cultura y Deportes y Bienestar Lic. Erika Estrada Mota; toman parte en recordar este gran acontecimiento de haber elevado el pueblo a la categoría de Ciudad, en el mandato de unos de sus hijos distinguidos Carlos Cruz Montiel. 

Viene a bien vivir el regocijo de las fiestas de la ciudad y hacer mención de las palabras de Waldo Emerson para ilustrar mejor tal acontecimiento: “nada grande se ha conseguido hoy, sino el entusiasmo” y ojalá en los próximos años esta fiesta de un hecho histórico tan importante, se realice como parte cultural de la identidad de nuestro pueblo: atrevida, con bombos y platillos; con añoranza y horizonte-luz como debe de ser, porque Tuxtepec se lo merece. Tuxtepec la llamada “Esmeralda del Papaloapan” es una agradable ciudad que armoniza con su asombrada historia.

Qué alegría tus tiempos de hoy, Tuxtepec. Agua luna, ojo de lluvia, canción de un inolvidable sueño.

El río Papaloapan te envuelve de identidad y te exalta. Ciudad llena de ritmo del trópico, el grito de la tarde-noche se vuelve fiesta memorable. Por eso termino diciendo de nuevo “nada grande se ha conseguido hoy, sino el entusiasmo” y ojalá este gran festejo que esta vez se realiza en buen intento; en los próximos años, las autoridades tomen consciencia de que se debe celebrar a Tuxtepec, no con una pequeña fiesta sino con un gran festejo a la altura de lo que hoy es; la más importante ciudad de la región del Papaloapan.

Celebro este tan regocijante acontecer con estos versos.        

LLORA EL RÍO

Agua que llora y se pierde

Es el río

Agua en los ojos del viento

Es el río

Luna limpia y esmeralda la noche

Es el río

También el alma/ mi rostro/ mis arrugas

Sin tiempo

Es el río