En Oaxaca diariamente son realizadas diez llamadas de emergencia por violencia contra las mujeres y 13 por violencia de pareja. Las cifras son sólo una aproximación a la emergencia por violencia de género que se vive en el estado, pues en muchos de los municipios de la entidad no existe este servicio.
Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), detallan que en enero de 2024 se recibieron 287 llamadas de emergencia por violencia contra la mujer y 411 por violencia de pareja.
Por probables incidentes de violencia contra la mujer es “todo acto violento que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”; mientras que incidentes de violencia de pareja son “agresión infligida por la pareja que incluye maltrato físico, sexual o emocional y comportamientos controladores por un compañero íntimo”.
Sofía Martínez Tejada, Directora General de Red de mujeres para una vida libre de violencia (REMUVI), señaló que este mecanismo de reacción ante una agresión no tiene la eficacia que se desearía pues en algunos casos llamadas no llegan a tener una respuesta de las autoridades y en otros casos la ayuda suele ser tardía.
A Sofía también le ha tocado experimentar la falta de eficacia en el servicio de emergencia. “Llamé para denunciar que alguien me estaba mandando al teléfono contenido sexual. Lo único que me dijeron era que bloqueara el número y que me presentara a la fiscalía a poner mi denuncia. Me dieron un folio para que le diera seguimiento, pero ellos no hicieron gran cosa. Así como eso hay más casos que van en el mismo sentido de que, aunque uno marque la atención no es tan rápida”, relató.
Por considerar que no son asuntos de importancia o de gravedad y lo que hacen es canalizar a las mujeres a la fiscalía, en otros casos la policía llega una hora después a brindar el auxilio. “Eso lo sé porque dimos acompañamiento a dos casos de Santa Lucía en donde las mujeres tienen medidas de protección. Cuando sus agresores se han acercado ellas marcan de inmediato a la policía y han llegado una hora y media después”.
La activista oaxaqueña consideró que en el contexto actual de Oaxaca predomina la, omisión, la injusticia y falta de empatía por falta de las autoridades quienes buscan encubrir la gravedad de la violencia contra las mujeres escondiendo número, y por otro lado también gran parte de la sociedad además de normalizar la violencia ya es insensible ante los feminicidios como expresión máxima de la violencia contra las mujeres.
