LOMA BONITA, OAX.-“La cuesta de enero sí está costando”, señalan algunos comerciantes de esta ciudad sobre la típica época en que se caen muchas cosas, para lo cual algunos negocios incluso buscan otras ubicaciones como alternativa.
Tras el transcurrir de las Posadas, Navidad, Año Nuevo y Reyes, “nos quedamos sólo mirando”, dijo un personaje de la calle Guerrero, sobre el momento complicado que se vive en estos primeros 15 días de enero, cuando la gente se queda gastada tras los regalos, cenas, detalles y obsequios que se presentaron.
Por ello, algunos negocios incluso le buscaron otra salida, como una farmacia que por remodelación se salió de la competencia grande en el centro y se fue al barrio El Conejo, aunque también señala que ahí tengo mayor clientela de personas que habitan en esas demarcaciones y colonias.
En el mercado “Vicente Guerrero”, doña Linda Sarmiento apunta que espera que todo mejore, pues en este momento estamos en los días del “mirador”, apuntando que su padre le decía que “era el lapso en el cual la gente sólo pasa, ve y pregunta precios…¡pero no lleva nada!”
Y es que ahora hay que esperar las quincenas, los apoyos a adultos mayores, auxilio a personas que aún les resta un “alguito” de su aguinaldo o, de lo contrario, aguantar a que lleguen las primeras quincenas al personal del ayuntamiento nuevo, que normalmente esto acontece ya en el mes de febrero.
Sin embargo, el municipio está queriendo también tener ingresos propios y puso descuentos interesantes en los servicios y pago de impuestos, para que la gente se anime, ahorre buenos pesos y el municipio se fortalezca, ya que al iniciar un trienio los dineros del gobierno federal y estatal tardan en arribar.
Quienes no ven mucho problema son la gente que vende su pollo, la carne, los productos que se utilizan a diario come el pan o la tortilla, pues quienes venden ropa o zapatos deberán aguantar un poco.
También las tienditas, torterías o taquerías tienen su venta casi normal, pues los alimentos son sagrados, mientras se observan a algunas personas disfrutando de un café en tardes y noches frías de invierno en la “Capital mundial de la piña”.
Así está la situación del nuevo año, donde también farmacias, doctores y laboratorios resienten estos temas, pese a que con la salud no se juega y hay que entrarle “a Belén cantando” con algún medicamento para la familia en días de pandemia y de camios bruscos del clima: sabroso calor o un espeluznante frío.
