TUXTEPEC, Oax.- Nahum Andrade, taxista desde hace 13 años, destacó que el gremio al que pertenece padece de varias dificultades, entre las que sobresale la económica, ya que siguen padeciendo los estragos generados por la pandemia, no obstante para fin de mes estiman tener una alza del 20 por ciento.
De acuerdo con los chóferes de taxis, el poco movimiento económico que se tiene en el municipio, así como el incremento en el precio del combustible son factores que causan una merma importante en las ganancias de quienes se dedican a esta labor.
Actualmente registran una demanda del servicio de aproximadamente el 65 por ciento, cifra que no logran superar y que los mantiene al día.
Para finales del mes de agosto, prevén que las diferentes instituciones educativas reactiven sus actividades de manera normal, lo que esperan genere un importante movimiento que beneficiará a ambos turnos.
Tomando en cuenta el regreso a clases, el servicio de taxis prevé un repunte del 20 por ciento, es decir, que pasarán del 65 por ciento al 85 por ciento.
Durante este 12 de agosto que se celebra el día del taxista, enfatizó que pese a ser un trabajo que demanda un horario fijo, son de los más desprotegidos, ya que mantenerse al volante los lleva a ser víctimas de la inseguridad, padeciendo asaltos.
Destacó que meses atrás era muy difícil realizar esta labor, sobre todo para quienes debían trabajar en el turno nocturno, el cual muchas veces era rechazado. Reconoció que actualmente se observa mayor presencia de unidades de la policía municipal y la marina, lo que les brinda mayor confianza.
Otra lucha que mantienen, es la falta de las prestaciones de ley, ya que son un gremio que carece de seguridad social, derecho a créditos y no generan una antigüedad que les permita una jubilación, pese a que existen chóferes con más de 20 años de servicio.
